Los servicios de la plataforma han dejado de estar disponibles, aunque su director ejecutivo asegura que tiene previsto reconstruirla desde cero
La red social Parler ha dejado de estar accesible en Internet después de que Amazon Web Services (AWS) cumpliera su promesa de retirar el acceso de esta plataforma a los servidores que ofrece la compañía de Bezos. El gigante anunció sus intenciones este domingo, sumándose así a los vetos impuestos por Google y Apple en respuesta a la falta de moderación de los contenidos vertidos en Parler, que según estas mismas empresas, abre la puerta a teorías de la conspiración, discurso de odio y contenidos que instigan la violencia.
La dirección web de la red social muestra ahora un mensaje de error, según ha podido constatar este periódico. Esto sugiere que la plataforma aún no ha encontrado servidores alternativos a los que mudarse. El propio director ejecutivo de Parler, John Mazte admitió la posibilidad de que los servicios de su empresa dejaran de estar disponibles durante una semana, pero se mostró dispuesto a reconstruirlos “desde cero”. Este proceso de restauración tendrá ahora que hacer frente a las retiradas de las galerías de aplicaciones de Apple y Google, y necesitará una nueva empresa de servidores en la que alojar toda su infraestructura.
“Intentaremos mudarnos a un nuevo proveedor ahora mismo, ya que hay muchos competiendo por nuestro negocio”, asegura Mazte en un post publicado ayer en su ahora desaparecida plataforma. El ejecutivo describe lo ocurrido como un ataque coordinado de los gigantes tecnológicos para eliminar la competencia. “Nos hemos preparado para eventos como este al no confiar en la infraestructura privada de Amazon y construir productos compactos”, precisó.
Parler, que se presenta como la alternativa de la “libertad de expresión” frente a Twitter y Facebook, se había convertido en los últimos meses en una especie refugio para los tuiteros más derechistas suspendidos de la red social o que, decepcionados por las nuevas políticas de privacidad y publicación en las principales plataformas, buscaban un espacio “sin censura”, como suele venderse esta red social, a la que no le gusta cargar con el sambenito con que habitualmente se la define, “la red de la ultraderecha”.
Fuente: https://elpais.com