Hace unos días Apple presentó la nueva generación de su iPhone, la cual trae consigo un nuevo SoC bautizado bajo el nombre de Apple A15 Bionic y que trae consigo una serie de mejoras respecto a su antecesor. No obstante todas las alarmas han estado sonando desde entonces en cuanto a la CPU con ISA ARM dentro del A15. ¿Qué es lo que está ocurriendo?
Hace un año que Apple que empezó la transición de sus Macintosh desde el uso de procesadores con ISA x86 a ISA ARM, en concreto a los mismos SoC que utilizan en sus dispositivos PostPC, iPhone e iPad, y lo hicieron con su SoC M1, el cual no era más que una versión de su A14X Bionic.
Pues bien, un año después Apple ha lanzado su A15 Bionic, el cual será la base para un eventual Apple M2 en la siguiente generación de MacBook e iMac. Entre sus novedades se encuentran mejoras en todos los aspectos respecto a su antecesor como es el uso de memoria LPDDR5, una nueva arquitectura de GPU que duplica la potencia de cálculo por núcleo, un Neural Engine con mayor capacidad, un nuevo códec de vídeo e incluso un nuevo ISP.
No obstante parece ser que el nuevo SoC de los de Cupertino guarda un oscuro secreto respecto al rendimiento de su CPU.
El Apple A15 Bionic se estanca en rendimiento de CPU
Siempre que aparece un nuevo SoC se espera que haya un aumento de rendimiento en todos sus elementos, en especial en el caso del procesador central o CPU, pero en este caso Apple ha ocultado el salto de rendimiento de una generación a otra, lo único que sabemos es que se trata de una configuración de 6 núcleos, compuesta por 2 núcleos Avalanche que son los de alto rendimiento y 4 de tipo eficiente llamados Blizzard.
Las alarmas han saltado por una afirmación de la propia Apple respecto al nuevo iPad Mini donde afirman que el rendimiento respecto a la anterior versión, basada en el SoC A12, ha mejorado un 40%. Lo cual no debería poner en alerta a nadie si no fuese por el hecho que es el mismo salto en rendimiento en el iPad Air con el A14 Bionic lanzado el año pasado y también con 6 núcleos.
Por lo tanto Apple está afirmando que la CPU en su nueva APU no ha sufrido mejoras de rendimiento respecto al modelo anterior, lo que ha llevado a ríos de tinta durante los últimos días debido a que se está transmitiendo por parte de los de Tim Cook que quieren echar el freno en cuanto a avances de CPU.
¿Es el fin de la época dorada para los procesadores de Apple?
Una de las mejores compras que se han hecho en el mundo del hardware es la que Apple hizo de PA Semi durante la década de los 2000, lo cual fue el germen que les permitió tener un equipo de desarrollo de hardware para la creación primero de sus iPhone y luego en su gama de productos para terminar incluso en sus ordenadores personales Macintosh, marcando la tercera transición en cuanto a ISA de la historia de la compañía.
Todo apunta a que pese a que los de Cupertino le han dado nuevos nombres a los núcleos de la CPU en el A15 Bionic realmente nos encontraríamos ante casi la misma arquitectura que su antecesor y como hemos comentado antes las mejoras vienen por parte de los procesadores de apoyo y los aceleradores que sí que habrían sufrido una mejora, ya que el nuevo SoC tiene un total de 15000 millones de transistores en comparación con los menos de 12000 millones del diseño anterior.
¿Qué dicen las malas lenguas? Pues que la marcha del ex-arquitecto jefe en CPU de Apple, Gerard Williams, para fundar Nuvia en combinación con otras 100 personas que estaban bajo su mando. En la actualidad la empresa es propiedad de Qualcomm, ya que fue comprada hace unos meses. Por lo que la empresa dirigida ahora por Tim Cook se ha quedado sin los ingenieros clave que le han permitido estar en la cresta de la ola en la última década.
Eso sí, no podemos negar que por el momento Apple tiene las mejores CPU bajo ISA ARM en la industria, pero habrá que ver cómo les afecta a medio plazo esta fuga de talento en el futuro de sus procesadores.
Fuente: HardZone