Durante el último trimestre del año pasado, AMD ha perdido cuota de mercado y no porque sus procesadores sean inferiores a los de Intel, sino porque su rival tenía más procesadores para vender. El bajo stock de procesadores AMD está empezando a pasarles factura, y su alta dependencia de TSMC al respecto podría costarles más caro de lo que todos piensan.
Los ingresos anuales de AMD crecieron un 45% durante el año 2020, y la empresa se encuentra ahora en una sólida posición en el mercado de la que no disfrutaba desde que Lisa Su llegó a los mandos de la compañía. No obstante, su alta dependencia en TSMC para la fabricación de chips está obstaculizando su crecimiento y los analistas de mercado opinan que esto podría costarles muchos enteros si no lo remedian pronto.
¿Tanto depende AMD de TSMC?
La arquitectura Zen 3 de AMD ha colocado a la compañía en una sólida posición de mercado dentro de los nichos de procesadores de escritorio, dispositivos móviles y centros de datos, pero su incapacidad para acceder al espacio de fabricación adicional de 7 nanómetros de TSMC ha impedido que AMD capitalice sus últimas innovaciones.
Ahora mismo, AMD no es capaz de suministrar suficientes productos de gama alta para satisfacer la demanda. Los últimos procesadores de la serie Ryzen 9 5000 Series siguen agotados en la mayoría de regiones, y las existencias minoristas de sus GPU de la serie Radeon RX 6000 son prácticamente inexistentes. Los socios de consolas de AMD, Sony y Microsoft, también están luchando por mantenerse al día con la demanda del mercado de sus últimas consolas, que como sabéis también comparten el nodo de 7 nm de TSMC.
Todas las capacidades de fabricación de AMD se basan en el proceso de litografía de 7 nm de TSMC, dejando su potencial de crecimiento en manos de la compañía Taiwanesa y su fabulosa capacidad de 7 nm. En este momento, la dependencia de AMD en TSMC es total y absoluta.
En 2020, la demanda de productos informáticos y juegos se disparó, con cuarentenas nacionales en todo el mundo. Estos factores obligaron a muchas familias a comprar nuevos dispositivos electrónicos, actualizar sus PCs e invertir en nuevos productos de entretenimiento para el hogar. Además de esto, muchas empresas necesitaban adaptarse a los nuevos esquemas de trabajo desde el hogar, lo que requería una inversión todavía mayor en PCs y portátiles. Aunque AMD pudo haber aprovechado esto para vender todavía más procesadores, no pudieron fabricar suficientes chips para satisfacer las demandas del mercado.
Intel, el principal rival de AMD en el mercado de procesadores, controla sus instalaciones de fabricación y eso les permitió reaccionar mejor a la pandemia y la situación que ha causado, dando como resultado que han estado recuperando cuota de mercado por primera vez en los últimos tres años y medio.
Con todo, AMD prevé un crecimiento de sus ingresos de un 37% durante 2021, un crecimiento menor de lo que todos esperaban de una empresa que literalmente no puede mantener sus productos en los estantes de las tiendas porque se venden en cuanto llegan. AMD también verá incrementados sus ingresos en procesadores semi-personalizados con la venta de las nuevas consolas Xbox y PlayStation, y la compañía ha regresado a la competitividad en el mercado de GPUs de gama alta por primera vez en la última década.
AMD no puede suministrar suficientes chips para mantener ninguno de sus productos de gama alta en stock, y eso resultará en pérdidas de ventas. Si AMD hubiera tenido acceso a más espacio en las fábricas de TSMC la compañía podría producir más chips y generar más ventas. La dependencia total de AMD en el nodo de 7 nm de TSMC los está perjudicando, y mucho pero, ¿qué otra cosa pueden hacer? Vamos a intentar dilucidarlo.
¿Qué puede hacer AMD en esta situación?
A corto plazo, AMD no puede hacer absolutamente nada para mejorar su capacidad de fabricación. AMD ha diseñado sus productos teniendo en cuenta el nodo de 7 nm de TSMC, y trasladar esos productos a una fundición de la competencia resultaría bastante complicado.
En el futuro, AMD debería considerar la posibilidad de diversificar su pila de productos, utilizando nodos de la competencia como Samsung para fabricar algunos de sus productos. Esto le daría a AMD dos lugares en los que poder aumentar su suministro de chips si lo necesitan, dando a la empresa más espacio para crecer. Dicho de otra manera, AMD podría por ejemplo fabricar su próxima generación de GPUs en las fábricas de Samsung y seguir con TSMC para procesadores, de manera que en caso de escasez no se vean afectados todos sus productos.
Cuando AMD pase a los 5 nm con la arquitectura Zen 4 de próxima generación, ya no dependerá de los 7 nm para todos sus productos. Esto permitirá a la compañía seguir produciendo productos de gama baja y media en este nodo de TSMC mientras que se podría enfocar en los de gama alta en otro nodo diferente, ejerciendo menos presión sobre la fabricación de AMD ya que en lugar de usar un solo nodo para todo, tendrían dos.
TSMC ya ha invertido en aumentar su espacio de fabricación para futuros nodos de litografía, ya que limitarían su propio crecimiento si permiten que esta situación se repita con los 5 nm.
Fuente: AMD depende demasiado de TSMC y está perdiendo cuota de CPUs (hardzone.es)