NVIDIA, ARM y el cuento de nunca acabar: Europa se opone a la compra

NVIDIA ARM

El romance entre NVIDIA y ARM parece que no llega a consumarse, y es que se trata de una de las operaciones más controvertidas de los últimos años, suficiente como para que los organismos reguladores de buena parte del mundo se opongan por completo, siendo la Unión Europea el último escollo para el acuerdo entre NVIDIA y ARM y retrasando todavía más la operación.

El interés de NVIDIA por ARM no es uno cualquiera, no solamente es una adquisición perfecta para la empresa de Jen-Hsung Huang al complementar sus recursos y habilidades sobre los ya existentes, sino que además supone poner patas arriba el mercado del hardware donde decenas de empresas deben su futuro a que ARM siga licenciando sus núcleos como hasta el momento.

El miedo de que NVIDIA convierta a ARM en una subsidiaria solo para su uso a medio o largo plazo ha puesto a muchas empresas del sector en todas las partes del mundo en alerta, lo que ha provocado que los mecanismos de regulación de todo el mundo hayan puesto «a la espera» la finalización formal del acuerdo.

¿Es posible que la compra de la década en cuanto al mercado del hardware acabe siendo una especie de matrimonio fallido por culpa de los comités reguladores en diferentes partes del mundo?

La Unión Europea le pone palos a las ruedas al acuerdo NVIDIA-ARM

NVIDIA GRACE

Según informa el diario británico The Telegraph, la comisión europea y en concreto los reguladores de la competencia, después de tomarse vacaciones el lunes de esta misma semana. Por lo que desde la Unión Europea ni tan siquiera han empezado a analizar la compra de ARM por parte de NVIDIA. El motivo que hay detrás de ello es que NVIDIA no habría presentado toda la documentación necesaria que piden los reguladores europeos, lo cual ha retrasado la revisión para el visto bueno de la operación hasta septiembre.

En el caso de que el análisis de la regulación empezará en septiembre, esta no sería inmediata y le tomaría como mínimo seis meses o más para completarla. Por lo que NVIDIA recibiría el visto bueno de la Unión Europea para bien entrado el 2022. Un escenario que además es el más optimista de todos.

Por la otra parte, NVIDIA necesita concluir el acuerdo de una vez por todas con tal de poder crear su propia totalmente integrada de CPUs, GPUs y DPUs de NVIDIA en todo tipo de mercados. Desde potentes superordenadores, servidores y centros de datos hasta dispositivos de bolsillo y quien sabe si la sucesora de la actual Nintendo Switch. Se ha de tener en cuenta además que tanto el actual poseedor de ARM, Softbank, así como la directiva de la propia ARM están de acuerdo en formar parte de NVIDIA.

ARM tendría problemas si el acuerdo con NVIDIA fracasara

Logo de ARM

Si el acuerdo entre NVIDIA y ARM fracasara por culpa de la Unión Europea, entonces es posible que ARM entrase en una oferta pública, ya que SoftBank está interesada en vender la empresa. El interés de otra empresa del sector, como por ejemplo Qualcomm que también ha mostrado interés, podría llegar a tener el mismo efecto regulatorio.

Con tal de asegurar la compra desde NVIDIA han presentado evidencia para darle soporte a la compra por 40.000 millones de dólares de ARM Holdings. El argumento de NVIDIA para construir el caso a su favor y que la aprueben la compra afirma que ARM está «completamente estancada en el barro» y que será incapaz de conseguir inversores más grandes que le permitan competir de frente a los gigantes estadounidenses, haciendo no solo referencia a Intel y AMD, sino también a Apple y Qualcomm.

Aunque el licenciamiento de la tecnología de ARM es en apariencia uno de los negocios más lucrativos del mercado del hardware. La realidad es que Softbank ha sabido manejar bien su enorme potencial como es debido. Es más, la amenaza de RISC-V como posible reemplazo de ARM en ciertos mercados amenaza también el futuro de esta ISA.

Fuente: HardZone