En un reciente evento de Microsoft y Qualcomm podrían estar sentándose las bases para un futuro Windows 12.
Los avances en chips como el Snapdragon X Elite, así como en inteligencia artificial y computación híbrida, podrían influir en un futuro y nuevo sistema operativo Windows.
Parece que poco a poco Windows 12 se asoma por la ventana, nunca mejor dicho. En un reciente evento organizado por Qualcomm, se presentó el chip Snapdragon X Elite, que podría cambiar las reglas de juego en cuanto al rendimiento de Windows en dispositivos específicos se refiere.
Este chip, sumado a los avances en inteligencia artificial, podría abrir un sinfín de nuevas posibilidades y mejorar la experiencia del usuario en los futuros ordenadores con Windows.
En este evento, representantes de Qualcomm y Microsoft compartieron un mismo escenario para discutir sobre el Snapdragon X Elite y las implicaciones de la inteligencia artificial en el futuro de Windows. Aunque no se mencionó explícitamente Windows 12, sí que se han dado pistas sobre cómo podría ser la próxima versión del sistema operativo.
Uno de los puntos más destacados fue el énfasis en la IA generativa, ya más que reconocida por chatbots como ChatGPT o Gemini. Según Satya Nadella, CEO de Microsoft, este tipo de inteligencia artificial podría ser tan revolucionaria como lo fueron los smartphones y la computación en la nube en el pasado.
Además, se discutió el concepto de computación híbrida, que combina la potencia de procesamiento local de los dispositivos con la capacidad de procesamiento en la nube. Esta combinación permitiría realizar tareas más avanzadas, especialmente aquellas relacionadas con la IA, que requieren una gran cantidad de recursos de procesamiento.
Ya hay indicios de cómo podría ser el Windows 12 del futuro
Vale, ¿y cómo se relaciona todo esto con un posible Windows 12? El chip Snapdragon X Elite de Qualcomm podría ser una pieza clave para futuras versiones de Windows, incluida Windows 12, ya que se espera que de un gran impulso en la capacidad de procesamiento y rendimiento de los dispositivos compatibles.
En cuanto a la IA y la computación híbrida, ambos enfoques podría ser muy importantes para futuras versiones de Windows, ya que permitiría a los dispositivos acceder a recursos de computación más potentes y escalables a través de la nube, lo que podría mejorar la capacidad de ejecutar aplicaciones y procesos exigentes en dispositivos de hardware más limitado.
Eso sí, pese a estas buenas noticias, ten paciencia porque este nuevo sistema operativo no se espera para 2024. Parece que la compañía podría estar esperando a que la tecnología de inteligencia artificial esté más madura para poder ofrecer una experiencia verdaderamente innovadora.
Fuente: computerhoy.com