El calendario marca el hito de la celebración del Día Mundial de las Telecomunicaciones y del Día de Internet en México (17 de mayo), fecha en la que se dan cuenta de los avances, pero también de los requerimientos necesarios para hacer extensible la conectividad a toda la población.
En este año también es relevante la cuantificación del ‘empujón digital’ o aceleración en la adopción de Internet, como consecuencia del confinamiento y la parálisis social y productiva derivadas de la pandemia.
Al respecto, la Asociación de Internet MX (AIMx) en colaboración con The Competitive Intelligence Unit (The CIU) desarrollaron y dieron a conocer el “17° Estudio sobre los Hábitos de los Usuarios de Internet en México 2021”[1] que desde hace varios años se constituye como el referente nacional para dimensionar el número de internautas, sus principales hábitos y preferencias en línea, así como las barreras que impiden alcanzar una plena democratización de la conectividad en nuestro país.
Usuarios de Internet en 2020
La contabilidad de usuarios de Internet en México ascendió a 86.8 millones en 2020, esta cifra es equivalente a la adición de 8 millones de internautas en un año y un coeficiente de adopción de 76.3% entre los mexicanos en edades de 6 años o más.
Derivado de este primer año pandémico, se aceleró el crecimiento en la contratación de Internet, tal que se registró un repunte en la tasa para alcanzar un nivel de doble dígito (10.2%), el mayor observado en el último lustro. Adicionalmente, se reporta que ocho de cada 10 desconectados pretende hacerse de un acceso a Internet en los próximos seis meses, lo que detonará aún más el uso de la conectividad, especialmente en ese cuarto de la población que aún no es internauta.
Uso y gasto en el servicio de Internet
Otro de los principales datos obtenidos por eleEstudio apunta a un incremento significativo en el uso de la conectividad para la realización de actividades diarias como aquellas educativas, laborales y de ocio, tal que 51% de los usuarios incrementó el tiempo de conectividad en el último año.
Mientras que, en el caso del gasto mensual en el servicio de Internet, uno de cada 10 decidió incrementar la velocidad de descarga de datos contratada y tan sólo 1% reporta una disminución en el pago de su factura, a pesar de las condiciones económicas adversas, la proporción restante (88%) mantuvo su consumo.
Hábitos de uso de Internet
En el último año, se ha expandido el uso de redes fijas para acceder a Internet a partir de la pandemia, tal que nueve de cada 10 usuarios se conectan por esta vía, mientras que la mayor asequibilidad y la expansión en la capacidad de descarga de datos se ha traducido en que siete de cada 10 internautas accedan por medio de redes móviles.
| Lugar de Conexión de los Internautas (Proporción del Total, %) |
En lo que toca al lugar de conexión, el hogar se consolidó como el sitio principal (90.9% del total de los usuarios) en el que se encuentran los internautas al acceder a Internet a partir del confinamiento y las restricciones a la movilidad, mientras que las escuelas redujeron significativamente su ponderación y pasaron a último lugar con una preferencia de 3.7%. El uso actual prácticamente corresponde a aquel que hace el personal administrativo.
Barreras a la adopción y uso de la conectividad
¿Por qué aún una cuarta parte de la población se encuentra desconectada? Las principales razones apuntan a la falta de habilidades digitales (41.6% del total de los no-usuarios), al bajo poder adquisitivo (25.6%), desinterés/no necesidad (20.0%), así como a la carencia de un dispositivo de conectividad (11.2%).
Los marcados esfuerzos de inversión en el desarrollo de infraestructura realizados por los operadores de telecomunicaciones han provocado que tan sólo 0.8% de la población desconectada, no pueda acceder a Internet por falta de cobertura o disponibilidad de redes en su ubicación geográfica.
Hasta aquí el balance y condiciones identificadas en el Estudio de la AIMX y The CIU evidencian un salto significativo en la adopción de la conectividad en el último año. Sin duda, esta aceleración ha detonado no sólo el uso de Internet, sino de todos los sectores que integran la economía digital, desde dispositivos, hasta aplicaciones y servicios. Todo en tan sólo un año en el que se precipitó la llegada de pronósticos que se tenían para periodos venideros.
Fuente: cio.com.mx
