Cuatro hábitos simples para proteger sus datos en línea.

Todos hemos estado ahí, mirando nuestro teléfono inteligente esperando que se instale una nueva aplicación. Deslizamos rápidamente los términos y condiciones antes de presionar “aceptar”, emocionados y listos para usar la última tecnología.

Las aplicaciones actuales ofrecen una comodidad y unos beneficios increíbles para las personas, las empresas y los gobiernos que las utilizan. Pero es muy probable que esté renunciando a algo a cambio: información personal.

La información personal es como el dinero: tiene valor. Al conocer sus puntos de vista e intereses, hábitos de gasto y los lugares a los que vamos, las empresas pueden brindarle una experiencia en línea más personalizada y aplicaciones gratuitas.

Además de su valor intrínseco en la economía de la información actual, los datos personales también son vulnerables a los piratas informáticos y otros riesgos. Al obtener nuestra información, el resultado a menudo es la pérdida de fondos, el crédito dañado o incluso meses dedicados a reparar su reputación financiera y personal. Peor aún, los piratas informáticos a veces comparten públicamente información personal sensible, a veces vergonzosa, para humillar o intimidar.

Con el comienzo reciente del nuevo año, muchos de nosotros hicimos resoluciones de Año Nuevo. En enero también es cuando la Alianza Nacional de Seguridad Cibernética reconoce el Día de la Privacidad de Datos para empoderar a las personas a actuar .

Entonces, ¿por qué no resolver ahora para proteger mejor su información personal? No significa que deba sacrificar la conveniencia o la nueva tecnología. Significa asegurarse de que su información se use solo de la manera en que se sienta cómodo.

Aquí hay cuatro cosas simples que puede hacer hoy para controlar mejor cómo se recopila, usa y comparte la información personal en línea:

  • Volver a lo básico: es decir, practicar una buena higiene. Al igual que lavarse las manos o cepillarse los dientes, puede crear hábitos diarios de privacidad de datos para evitar problemas mayores. Hábitos como usar autenticación multifactor y contraseñas seguras, instalar actualizaciones de software de inmediato y configurar correctamente la configuración de privacidad son un gran comienzo. Estos ofrecen la primera y mejor línea de defensa para proteger su información personal.
  • Actualizar el teléfono inteligente: instalar y utilizar el sistema operativo, las aplicaciones y los navegadores web más recientes puede ayudar a defender nuestros teléfonos y su contenido contra el malware y otras amenazas en línea. Sí, esto también es higiene, pero es lo suficientemente importante como para llamarlo por separado.
  • Cuestionarnos frecuentemente: nuestra información y dignidad tienen valor. Antes de completar un formulario o enviar información personal en línea, es fundamental preguntarnos: “¿Por qué necesitan esta información?” Luego, decidir cuánta información queremos compartir. Por ejemplo, es posible que un formulario en línea que recopila información personal no requiera que complete todos los campos de datos. Usemos ese poder y dejemos algunos campos en blanco. Además, debemos prestar atención a la fuente de la solicitud para evitar intentos de phishing.
  • Eliminar una aplicación cuando ya no la usemos: eliminar una aplicación o cuenta no utilizada con una plataforma en línea es una buena práctica de seguridad. ¿Por qué? Porque cuando descargamos una aplicación o se une a una plataforma de redes sociales, por lo general solicita permiso para acceder y recopilar información de otras áreas de su vida, como sus fotos, contactos y ubicación. A menudo, puede obtener una copia de su información antes de eliminar la aplicación o la cuenta.

Cuando un reportero le preguntó al infame Willie Sutton por qué robaba bancos, respondió: “porque ahí es donde está el dinero”. Nuestros datos personales son una nueva forma de moneda y hay nuevos delincuentes que ven su valor. Los buenos hábitos de privacidad de datos pueden ayudarnos a controlar quién puede acceder a su información personal. Al considerar las resoluciones en torno a la creación de buenos hábitos y la eliminación de los malos, no olvidemos una de las partes más importantes de nuestra vida: lo que hacemos en línea.

Fuente: cio.com.mx